No pudimos elegir mejor destino que Schiermonnikoog para nuestro fin de semana. Schiermonnikoog es del oeste la quinta isla holandesa habitada y pertenece a la provincia de Frisia, con una longitud de más de 18 kilómetros y una anchura 4 kilómetros, también, es un municipio que lleva el mismo nombre. Quien pase un fin de semana en Schiermonnikoog , podrá disfrutar de su variedad de paisajes compuestos por dunas, bosques, playas y el Mar de Wadden, así como la diversidad de flora y fauna, lo que te sorprenderá y te hará sentir en un país extraño, físicamente estando en uno de los países de Europa. Por lo que volverás recargado de nuevas energías.
¿Qué hacer y disfrutar durante la visita en Schiermonnikoog? Ya les cuento.
Durante nuestro fin de semana, disfrutamos de:
Las Playas: Las playas de Schiermonnikoog son blancas (casi no holandesas) y muy anchas. Se encuentran entre los más amplios de Europa. Se puede dar un agradable paseo, relajarse, nadar o bien disfrutar volando cometas, ya que el viento es ideal para esta actividad.
Hay dos tiendas de playa en Schiermonnikoog: Paviljoen Paal 3 y Strandpaviljoen De Marlijn en éste el mar está un poco lejos, pero igualmente puedes disfrutar de una hermosa, amplia y blanca playa. Acá hay un restaurante donde si eres amante de los mariscos, podrás disgustar de mariscos bien, pero bien frescos.
Ciclismo: Nada mejor como disfrutar del viento, la naturaleza y respirar aire fresco mientras recorres los kilómetros de carril de bici. Se puede alquilar una bicicleta fácilmente en línea o bien una vez que estés en la Isla, mediante la compañía Soepboer.
Los Faros: Estos son imprescindibles en una Isla, por lo tanto, no puede faltar su visita. En Schiermonnikoog hay dos faros: uno rojo y otro blanco. El faro rojo es el Noordertoren, es un faro que incluso está tripulado. La otra torre se llama Zuidertoren y solo se usa como torre de transmisión. Lamentablemente no puede entrar, por lo que debes admirarlos desde el exterior.
El pueblo de Schiermonnikoog: Actualmente tiene menos de mil habitantes, por ende, hay un solo pueblo en la isla, es muy pintoresco y lo más llamativo es la enorme mandíbula de una ballena recuerdo de la caza de ballenas. En el pueblo también encontrará un supermercado, cajero automático, varios restaurantes, tiendas, hoteles y un bar. En resumen: todas las instalaciones que necesita durante sus vacaciones en Schiermonnikoog.
Delicias culinarias: Si desea completar sus vacaciones en Schiermonnikoog, reserve una mesa en el restaurante De Ware Jakob. En este acogedor restaurante donde podrá disfrutar de una deliciosa velada culinaria. También es asequible por solo € 23.50 un exquisito platillo principal. ¡Y por qué no! Si aún NO estas listo para sumergirse en su cama, siempre puedes tomar una copa después de la cena en el único bar de baile en Schiermonnikoog: el Toxbar.
Estas son algunas de la actividad que puedes realizar durante la visita en esta fascinante Isla holandesa, sin embargo, existen otras actividades que se realizan como: yoga en la playa, caminatas en grupos, montar a caballos, en fin todo depende de la temporada que quieras visitar este hermoso santuario.
Cómo puedes llegar a Schiermonnikoog
La isla Schiermonnikoog es accesible en ferry(bote). El ferry sale desde Lauwersoog, en la frontera entre Frisia y Groninga. No puedes llevar el automóvil, la moto o ciclomotor a Schiermonnikoog sin una licencia especial del ayuntamiento. Así que, si vas en coche en Lauwersoog, en el puerto, hay dos aparcamientos amplios, pero ten en cuenta que durante la alta temporada puede durar media hora aparcar y comprar billetes. Cuando desembarques, podrás tomar un autobús o taxi al pueblo y en verano puedes alquilar bicicletas.
No olviden de disgustar la cerveza local Hippo, que entre su ingrediente esta la baya de espino amarillo , son acidas , pero muy saludable. Crecen a finales del verano y principios del otoño, la isla se vuelve naranja.
Sin lugar a duda un fin de semana en Schiermonnikoog es una escapada a un mundo sin atascos.